También conocida como tendinopatía anserina, es una causa frecuente del dolor del compartimento interno de la rodilla. Se puede dar en deportistas como corredores de larga distancia, pero también es frecuente su aparición con el aumento de peso y aumento del pie plano y valgo de rodilla.
La pata de ganso se compone de la inserción de un tendón común de 3 músculos: semitendinoso, grácil y sartorio.
Semitendinoso
Músculo que forma parte de los isquiotibiales, recorre la parte posterior del muslo, y se encarga de la flexión de la rodilla y extensión de la cadera.
Recto interno o Grácil
Músculo que recorre la parte interna del muslo y que se encarga de realizar rotación interna de rodilla y flexión y aducción de cadera.
Sartorio
Es el músculo más largo del cuerpo. Va desde la cara externa de la cadera a la parte interna de la rodilla. Este músculo se encarga de realizar flexión de rodilla, y flexión, aducción y rotación externa de cadera.
SÍNTOMAS
En fases tempranas de la tendinopatía de la pata de ganso se puede producir dolor de características mecánicas. Al iniciar la carrera aumenta, disminuye o desaparece durante el entrenamiento, y vuelve a aumentar posterior a la actividad realizada. Para saber más detalle sobre el dolor en tendinopatías haz click aquí.
Por lo general, los síntomas que nos indican la presencia de esta lesión son:
Dolor persistente en la parte anterio-interna de la tibia.
Dolor al presionar sobre la zona de inserción de estos tres músculos.
Puede aparecer inflamación sobre la zona dolorosa.
Dolor sobre todo por las mañanas al levantarnos.
Dolor en situaciones como levantarse de una silla o salir del coche.
FACTORES DE RIESGO
Existen numerosas factores que condicionan la aparición de ésta lesión tan común entre la población. Algunos de ellos podremos trabajarlos para modificar y mejorar los síntomas como el dolor.
Valgo de rodilla: aumenta la carga articular del compartimento interno de la rodilla y favorece la puesta en tensión del tendón de la pata de ganso. El valgo de rodilla es fisiológico y es mayor en mujeres que en hombres, por lo que es una lesión más prevalente en éste segundo grupo.
Pie plano: la pérdida del arco plantar, debilidad en la fuerza de la musculatura intrínseca del pie y el propio pie plano son factores que favorecen el aumento del valgo de rodilla, contribuyendo así a la puesta en tensión de los tendones.
Debilidad de musculatura abductora: los estabilizadores de cadera como el glúteo medio y menor, así como el glúteo mayor (encargado de propulsar) en la marcha y la carrera, contribuyen a disminuir el ángulo Q. Este ángulo es el que conforman el fémur y la articulación de la cadera, y cuanto menor sea, menor será el valgo de rodilla.
Otros factores: artrosis de rodilla, diabetes, osteoartritis o una vida sedentaria son algunos factores contribuyentes a la aparición o perpetuación de la tendinopatía de la pata de ganso.
Si tienes dolor en la cara interna de la rodilla, compatible con los síntomas que anteriormente has leído, reserva cita online en el siguiente enlace:
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