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  • Foto del escritorÁlvaro

Esguince de ligamento lateral externo de tobillo.

Actualizado: 11 abr


El esguince de tobillo es la lesión más común en la articulación del tobillo y consiste en una distensión, ruptura parcial o total del ligamento. El esguince de tobillo representa el 38 % de las lesiones del aparato locomotor. Dentro del mundo deportivo, representa el 40-50% de las lesiones del baloncesto y el 20% de las lesiones de fútbol o atletismo, entre otros.


Las estructuras pasivas encargadas de dar estabilidad a la articulación del tobillo se pueden englobar en dos complejos principalmente, el interno y el externo. Éstas estructuras son la cápsula articular, los ligamentos, inserciones tendinosas, etc. Dentro de los esguinces de tobillo, el más común es el de ligamento lateral externo (LLE).


Según el grado de la lesión, clasificamos los esguinces en varios tipos:


  • Grado I: distensión ligamentosa que puede presentar alguna ruptura de fibrillas del ligamento, con poco dolor e impotencia funcional, hematoma nulo o escaso y sin inestabilidad significativa. Acudimos al término torcedura o distensión cuando tenemos este tipo de grado.


  • Grado II: presenta rupturas parciales del ligamento, impotencia funcional y dificultad a la hora de andar. Suele observarse una equimosis y hematoma, con dolor localizado en la zona externa e inestabilidad al andar o estar de pie. Es el más común en la práctica deportiva amateur.


  • Grado III: ruptura completa o casi completa del ligamento e inestabilidad importante de la articulación. Presenta signos inflamatorios y dolor agudo, con imposibilidad de andar o estar de pie. El LLE se compone de 3 fascículos (anterior, medio y posterior), y en este tipo de esguinces al menos se ven afectados 2 o 3 de ellos, lo que puede requerir en deportistas de élite recurrir a cirugía para garantizar la estabilidad de la articulación.





Pronóstico del esguince LLE de tobillo

  • Grado I: 2 semanas

  • Grado II: 3-4 semanas

  • Grado III: 4-6 semanas

Los plazos de recuperación pueden variar en función de cada caso y los factores asociados a la lesión. Los tiempos estimados incluyen desde el día de la lesión hasta la incorporación total al deporte o actividad de la vida diaria.



¿Por qué se produce? Mecanismo lesional.

El esguince de tobillo se produce por el movimiento de inversión forzada (imagen de abajo). Debido a esto, el complejo lateral externo se distiende progresivamente.


Si la distensión y el desplazamiento superan la resistencia del tejido (stiffness), los ligamentos se desgarraran parcial o totalmente, sea en toda su continuidad o en algunas zonas de inserción ósea. En ocasiones se puede arrancar hasta un pequeño fragmento óseo de la zona de inserción.


Si el movimiento de inversión continúa, al desgarro de los ligamentos del tobillo le sigue el de la cápsula articular y de las fibras de la membrana interósea, afectando gravemente la estabilidad de la articulación.



INVERSIÓN FORZADA



El peroneo lateral largo es el principal músculo eversor. Existe una activación de la musculatura peronea a los 54ms iniciada la inversión, que nos protege, equilibra y estabiliza el tobillo frente al movimiento brusco de inversión. Éste es el mecanismo que tiene nuestro cuerpo de evitar este tipo de lesión, pero a pesar de esta precoz activación, en ocasiones resulta insuficiente cuando existe un movimiento de alta energía.


Por todo ello, es de suma importancia en el tratamiento de fisioterapia trabajar y reeducar la musculatura peronea en un esguince de tobillo, con el objetivo de activar de forma correcta y a tiempo ésta musculatura y proteger así nuestra articulación.


Sintomatología

  • Dolor local

  • Hematoma

  • Inflamación

  • Impotencia para caminar

  • Incapacidad para mover la articulación del tobillo sin sentir dolor



¿Hay que inmovilizar el pie después de un esguince?


Desde el punto de vista de la fisioterapia la indicación es la movilidad precoz y la carga parcial frente al reposo absoluto, en función de la impotencia funcional del paciente. De esta manera debemos guardar reposo relativo las primeras 24-48h, pero pasado ese tiempo debemos comenzar a mover (siempre con precaución y siguiendo los consejos de un profesional) con el objetivo de acortar los plazos de recuperación.


En los esguinces de primer o segundo grado es totalmente contraproducente inmovilizar o escayolar la pierna, ya que tras un periodo de inmovilización las consecuencias a nivel muscular y articular son atrofia, alteración de la percepción sensitiva y motara, pérdida de coordinación y equilibrio, etc...


Lo más recomendable es empezar con la fisioterapia lo antes posible. Los estudios demuestran que la movilización analítica ayuda a la mejora de la resistencia del ligamento y su cicatrización. El pronóstico para una recuperación completa en esguinces de primer o segundo grado suele ir desde las 2 a las 6 semanas, en función de la gravedad del esguince.


Sólo en el caso de los esguinces de tercer grado es necesario la intervención quirúrgica y unos plazos de inmovilización, reposo y recuperación más largos.




¿Por qué es importante realizar fisioterapia después de un esguince?

El tratamiento de fisioterapia es fundamental de cara a conseguir una óptima recuperación del esguince y evitar que haya recidivas, ya que de no ser así es muy frecuente que suframos de manera constante nuevos esguinces. Cerca del 70% de las personas que han sufrido un esguince de tobillo vuelven a sufrir esta lesión.


Esto depende fundamentalmente de que el ligamento se recupere bien pero también de que se trabajen y se recuperen aspectos como la fuerza muscular, la propiocepción o el equilibrio. Un buen trabajo de readaptación deportiva nos garantizará un menor riesgo de volver a sufrir una recidiva.



Tratamiento de fisioterapia

El tratamiento se enfoca en cuatro objetivos fundamentales:

  • Reducir el dolor y la inflamación

  • Favorecer la curación del ligamento

  • Recuperar la funcionalidad del tobillo

  • Generar estímulos de carga exigentes para prevenir recidivas


Es importante no esperar una curación espontánea para evitar secuelas de inestabilidad crónica o inflamación residual. Ante un esguince, el tiempo es un factor muy a tener en cuenta a la hora de una óptima recuperación. Cuanto antes se empiece a tratar, mayor probabilidades de éxito y velocidad en la recuperación.


Fase 1. Hemorrágica e inflamatoria (0-48h)

  • PRICE: método de actuación inicial tras una lesión consistente en Protección, Reposo, Hielo, Compresión y Elevación.

  • Vendaje: el vendaje compresivo ayuda a reducir la inflamación durante las primeras 48h.

  • Terapia manual: técnicas específicas para el tratamiento del dolor y otros síntomas de disfunción neuro-músculo-esquelética, que se caracterizan por ser aplicadas manualmente.

  • Flossing bands: método que se basa en el uso de bandas elásticas para hacer una compresión sobre la articulación afecta con el objetivo de disminuir el flujo sanguíneo de la zona (isquemia local) y neuromodular la información dolorosa que le llega al sistema nervioso central, permitiendo ganar grados de movilidad, fuerza, estiramiento, etc.

  • Drenaje linfático: técnica que ayuda a drenar el edema del tobillo y así ir reabsorbiendo la inflamación presente.

  • Movimiento activo libre no asistido: el paciente realiza movimientos en todos los planos para movilizar el tobillo y evitar así la restricción de movilidad articular del tobillo.






Fase 2. Fibroblástica (1º-2º semana)

  • Ejercicios de fortalecimiento: goma elástica, peso libre, etc

  • Reducación de la marcha: reaprendizaje a caminar con seguridad y eficientemente. El fisioterapeuta evalúa patrones anormales y emplea tratamientos como el fortalecimiento y el entrenamiento del equilibrio para mejorar la percepción de estabilidad corporal.





Fase 3. Remodelación-maduración(2º- 6º semana)

  • Propiocepción: es el sentido que informa al organismo de la posición de las partes corporales. Regula la dirección y el rango articular del movimiento y permite las reacciones y respuestas automáticas. Es una parte importante a la hora de trabajar en un esguince de tobillo e incluso para prevenir dicha lesión.

  • Readaptación deportiva: fase de pre-optimización en la que sometemos al paciente a estímulos y cargas exigentes que le preparan para realizar la práctica deportiva con seguirdad, evitando recidivas.




Si has sufrido un esguince de tobillo y crees que podemos ayudarte, consulta con tu profesional de confianza.






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